Para ello antes de empezar podemos sujetar el papel por los bordes con una cinta adhesiva a la mesa para que a la hora de secarse no se arrugue. Aconsejo que no echemos demasiada agua junto con el cafe cuando los pongamos en un bol o vaso pues puede que el color resultante sea demasiado suave. Elegimos el colorante del papel porque es el más fácil de conseguir y da muy buen resultado, siendo este irregular y amarillento.
A la hora de aplicarlo valdrá con una esponja o gasa, intentando evitar utilizar pinceles en los que se notan las pinceladas. Hay varias maneras de aplicarlo con la gasa:
1. Dándole una pasada general y uniforme que deje el papel amarillento y luego aplicando en los bordes varias pasadas. Dando el aspecto de una hoja de una antigua biblioteca.
2. Dándole suaves pasadas con el algodón poco cargado para darle un aspecto de papel desgastado.
3.Como en la fotografía aplicarle una capa general con mucho tinte sobre el papel y luego dejando pequeños charcos en el papel para darle aspecto de piel.
Una vez seco lo escanearemos o le haremos una foto con la luz adecuada y lo meteremos en photoshop. Allí mediante pinceles y máscaras de retoque conseguiremos que el papel parezca mas viejo y oscuro o más claro y con otros colores.
Papel normal planchado Papel anaranjado Papel brillo
Papel absorvente
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