Antes de imprimir en un dispositivo, solemos hacer una prueba de color para comprobar que la impresión que vamos a realizar se hará en perfectas condiciones (sin variaciones tonales, fallos de registro...)
En la prueba de color se suele poner una imagen con mucho detalle en las luces, una imagen con muchos tonos oscuros, otra muy detallada y una imagen con tonos "memoria".
También se ponen colores prepuestos (pueden ser rojo, verde y azul), que son los que parten de los básicos de impresión (Cían, magenta, amarillo y negro)
Se ponen repetidas veces distintos porcentajes de las distintas tintas por separado y combinadas como en el caso del negro denso.
Se añaden degradados.
Para comprobar la calidad de los textos también se imprimen textos que varían su tamaño
También se hace con texto negativo
Se añadien puntos de distinto tamaño y tramas para ver la calidad del punto
Diferentes tramas con los porcentajes para que en las planchas podamos controlar la calidad de la plancha.
Hoja final:
En la prueba de color se suele poner una imagen con mucho detalle en las luces, una imagen con muchos tonos oscuros, otra muy detallada y una imagen con tonos "memoria".
También se ponen colores prepuestos (pueden ser rojo, verde y azul), que son los que parten de los básicos de impresión (Cían, magenta, amarillo y negro)
Se ponen repetidas veces distintos porcentajes de las distintas tintas por separado y combinadas como en el caso del negro denso.
Se añaden degradados.
Para comprobar la calidad de los textos también se imprimen textos que varían su tamaño
También se hace con texto negativo
Se añadien puntos de distinto tamaño y tramas para ver la calidad del punto
Diferentes tramas con los porcentajes para que en las planchas podamos controlar la calidad de la plancha.
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